LOS BENEFICIOS DEL SEXO

Los beneficios de las relaciones eróticas (tanto a nivel individual como compartidas) son muchísimos, así que toma nota...

Para empezar, es una bonita forma de socializarnos y comunicarnos con otras personas, y en la pareja fortalece los lazos amorosos por la actuación de algunas hormonas como la oxitocia. También aumenta la confianza y la intimidad, la pasión,… y otras muchas cualidades, que hace que sea un pilar importante de las relaciones.

A nivel más individual, con la masturbación, también aumenta la segregación de la serotonina, u hormona de la felicidad; por lo tanto nos sentimos mucho más felices. Esto ayuda a combatir el estrés, ya que la serotonina acaba con la tensión muscular física y emocional, incluso horas después.

El sexo es un buen ejercicio cardiovascular, y como tal nos mejora el tono muscular, perdemos calorías, liberamos toxinas, etc... . Una sesión de sexo (en este caso no cuenta la masturbación) reduce la presión arterial alta y activa la circulación sanguínea. Además, esta comprobado que en la fase de excitación sexual, se aumenta la segregación de testosterona y DHEA (dehidroepiandrosterona), que protegen al músculo cardíaco.

Como cualquier ejercicio, nos ayuda a mantenernos en forma; una sesión de 30 minutos, equivale a 150 calorías, eso sí, debe ser una actividad moderada-alta, no vale con estar muy pasivos.

Las relaciones sexuales ayudan a mejorar el cutis. La piel se pone más radiante y rejuvenecida ya que vamos eliminando toxinas en sangre y tejidos por lo que prevenimos el envejecimiento celular.

El sexo ayuda al cuidado de nuestros genitales, ya que cuando nos masturbamos o tenemos relaciones íntimas con otras personas, mantenemos activa la zona genital. La vagina debemos de ejercitarla como cualquier otro músculo de nuestro cuerpo, ya que si no lo hacemos termina siendo más laxa e incluso puede ir atrofiándose con el paso de los años.

En los hombres, mantener la zona genital activa, hace que la sangre llegue a los cuerpos cavernosos y los mantenga saludables, y el eyacular, también sirve de prevención para el cáncer de próstata ya que se produce una limpieza de esta zona con la expulsión del semen.

Las personas que son sexualmente más activas tienen menos riesgo de contraer enfermedades o infecciones ya que mejora el sistema inmune.

Durante una relación sexual se moviliza mucho óxido nítrico, que es una sustancia que mejora la circulación periférica para calmar las migrañas relacionadas con alguna dificultad vascular.

Además de esta sustancia, se liberan gran cantidad de endorfinas y oxitocinas que reducen los dolores ginecológicos, musculares (migrañas tensionales también entrarían aquí) y articulares. Así que el dolor de cabeza ya no es excusa para tener un encuentro amoroso.

El estilo de vida desenfrenado que llevamos hace que proliferen los problemas de ansiedad, de echo, es la enfermedad del siglo XXI, pues bien, el masturbarte o tener relaciones sexuales hace que tu cabeza se evada de todas esas preocupaciones y hace que el cuerpo se relaje. Puede ser una forma muy sana de intentar contrarrestar este tema, aunque tampoco es que sea la cura.

Hay estudios que parecen demostrar que ser actualmente activo aumenta el crecimiento de las neuronas en el hipocampo de cerebro; así que estimular la producción de neuronas en la edad adulta ayuda a la conservación de la memoria y a la prevención del deterioro cognitivo.

El sexo favorece el sueño. Ya he comentado que se producen muchas hormonas durante el coito o la masturbación, entre ellas la oxitocina y la melatonina; estas son esenciales para una buena calidad del sueño.

Mantener relaciones sexuales con frecuencia provocará que el sexo sea mejor y aumentará por ello nuestra libido. En las mujeres se genera lubricación vaginal extra durante una relación sexual ya que hay un aumento del flujo sanguíneo en la vagina y una mejora de la elasticidad.

Ya ves que todo son ventajas, y no hace falta tener pareja para poder disfrutarla y conseguir todos los beneficios. Tenemos que conocernos y sentirnos a gusto con nosotros mismos y no hay mejor forma que disfrutar de nuestro cuerpo y nuestra mente que con la sexualidad, que es muy amplia. Nosotros mismos ponemos nuestros límites, no hay que hacer nada que nosotros no queramos o no estemos muy convencidos.

Hay que dejarse llevar por las sensaciones y las emociones que nos puede generar y ser felices, disfrutar de todo lo que nos proporciona la vida y no preocuparnos por el qué dirán.